Susurro: Habla

Eso es, ¿qué esperas? ¿Para qué están las palabras sino para usarlas? Vamos, convénceme, engáñame, persuádeme, hazme creer que tu opinión es la única válida y la única que nos puede llevar a alguna parte. Deja que las palabras fluyan como un torrente de tu boca hacia nuestros oídos y que nuestras creencias, convicciones e ideales se moldeen de acuerdo a ellas.

¡Espera! ¿Qué haces? ¿Intentas llevar a la acción tus palabras? ¿Has enloquecido? ¡Detente! ¡Ahora! ¡Vamos, detente! ¿Qué estás haciendo? ¿Acaso no comprendes como funciona el mundo? Eso es, siéntate un momento. Bebe un poco de agua y escucha algo de música. Sí, sí, tranquilo, no hay necesidad de apresurar las cosas.

Déjame que te explique: Tus palabras, tus promesas, tus quejas, tus opiniones, tus dichos, tus apariencias, tus engaños, tus máscaras es todo lo que necesitas. Nadie quiere tus actos. ¡Los repudiarán! Quédate en la seguridad de esas palabras de palta, que convencerán y aunarán las fuerzas de muchos más. ¡Deja que otros se encarguen de la cosecha! Tú encárgate de que la siembra sea la que tú desees.

¿Qué dices? ¿Qué las acciones son las que realmente valen? ¡Tonterías! Las acciones déjaselas al resto. Ellos sabrán cómo reconstruir todo lo que hayamos destruido con nuestras insidias. Lo importante es que todos sepan que tú eres quien habló primero, quien lo puso en la mesa de la conversación y quien primero denunció la situación. ¡Fuiste el primero que nos hizo saber lo mal que estaba todo!

¡Qué importa si no tenías una solución ni una intención de solucionarlo! Lo esencial es que todos sepan lo que has dicho, que recuerden tu voz y tu rostro al hablar. Aprovecha la situación: habla y luego márchate. Deja que el resto se encargue. ¡No puedes hacerlo todo solo!

Eso es, ve a dar una charla. Ve y escribe un artículo. Publica algo en una red social. Denuncia. Habla. Ataca. Acusa. Defiende. Critica. Opina. Vuelve a hablar. Pero no hagas nada más. Que no se acostumbren a buscar soluciones, voluntad e iniciativa. Para eso están ellos.